Viejas costumbres...

Hay momentos en los que hay que renovarse, pero no con novedades sino con viejas costumbres, esas pequeñas cosas que a veces damos por perdidas, esos momentos que a veces extrañamos y no nos paramos a pensar que ¿acaso no es mejor volver a tenerlos?, así pues este fin de semana pasado saque fuerzas de flaqueza de donde no pensaba ya que las tendría, y sin pensarlo mucho, más bien absurdamente, convoque una reunión de urgencia con dos personas de las cuales me siento orgulloso, dos grandes amigas con las cuales paso grandes ratos, y también oscuros momentos; hay veces que la amistad también necesita que le saquen un poco de brillo, que salgan a relucir esas pequeñas cosas que la hacen especial, y volver a pasar esos momentos que, sin tener mucho sentido, son de las cosas más maravillosas que hay.


No des por perdido algo cuando no hay nada que perder. (L.A.V.)